El Gran Premio de Gran Bretaña fue el cierre de un fin de semana para el olvido para Franco Colapinto. El joven piloto argentino, que llegaba a Silverstone con expectativas renovadas tras algunas mejoras en su rendimiento, no pudo siquiera salir a pista en la carrera principal debido a un problema técnico que lo dejó sin chances desde el arranque.
La jornada del sábado ya había dado señales de alerta: Colapinto se despistó durante la clasificación y su monoplaza sufrió daños que impidieron que pudiera continuar. Pese al traspié, el equipo trabajó contrarreloj para dejar el auto en condiciones.
Pero cuando todo parecía encaminado para que al menos pudiera remontar desde atrás, surgió un nuevo imprevisto: al momento de largar, la caja de cambios volvió a fallar y condenó al argentino a ver la carrera desde el box. Desde la radio, Colapinto dejó en claro su frustración con una frase que retrata el momento que atraviesa: "Es lo mismo que en Barcelona", dijo, haciendo referencia a otro episodio reciente donde una falla mecánica frustró sus chances de competir.
Colapinto y su equipo tendrán ahora dos semanas para analizar lo ocurrido, intentar dar con las causas de las reiteradas fallas técnicas y llegar con otra cara al próximo compromiso: el Gran Premio de Bélgica, que se correrá el 27 de julio.
Hülkenberg y un podio histórico
El británico Lando Norris se consagró ganador de un Gran Premio donde gran parte de la prueba se corrió bajo condiciones climáticas que complicaron a la mayoría de los pilotos. La fecha 12 del calendario de la Fórmula 1 confirmó porque McLaren está por encima del resto en la Máxima: el equipo de Woking logró su quinto 1-2 de la temporada y encabeza el Campeonato de Constructores por amplio margen. Hulkenberg hizo historia y en su carrera número 239 se subió por primera vez al podio con el Sauber tras largar en el 19° lugar de la grilla.